viernes, 12 de mayo de 2017

La estructura del ingeniero

Quizá no es el mejor día debido al gran cabreo que tiene o quizá si sea el momento. Planteamos las variables del problema (que no sabemos si tendrá o no solución).

Empresa primera que llamaremos A. Es el cliente final, el primero que paga, el primero que exige, el que debería tener todo el conocimiento en caso de necesidad.

Empresa segunda que llamaremos B. A la que A subcontrata sus proyectos, le debería pedir cuentas y cuyo interés real es vender chatarra no servicios. Estará llena, en su mayoría, de personal altamente incualificado o de horas a las que cargar un trabajo. Los buenos no saben encontrar su lugar y les invitan muchas veces a salir. Dan cursos de mala conducta y bajos fondos.

Empresa terea o consultora que llamaremos C. A la que B le subcontrata el proyecto de A. Llena de lo que definiremos como ingenieros, no por título, sino por su capacidad para resolver los problemas que amplifican tanto A como B.

Con el paso del tiempo A pierde todo el conocimiento, B en su día pagó mucho por ello y ahora prefiere pagar menos. C tiene todo ese conocimiento pero es tan difícil pagarlo. Pero claro, A quiere a todos esos ingenieros.

Pasado un tiempo más, A ve que su gente está parada y decide quitar unos pocos proyectos para hacerlos ellos. Ya que si una churrera hace churros no será difícil y ellos lo harán mucho mejor y mucho más rápido. Eso si, vamos a aprovechar que tenemos a C para que además de todo lo que hacen, primero lo expliquen luego lo revisen y ya veremos.

Eso en números supone que A no paga a B que tampoco paga a C. Unos obtienen menos beneficios mientras lo que queda se pluriemplean.

Llega un momento que C se satura por el despropósito de A y el desgobierno de B y entonces cunde el pánico y saltan todas las alarmas. Algo (y ojo que digo algo y no alguien ni quien) se está haciendo mal. Corre, corre, rápido que como se ha hecho mal (impersonal) dile a B que obligue a C a hacerlo, para ayer y a coste cero, que seguro que está en el contrato.

C, no sabe como, lo hace, bajo la presión asfixiante  de quien solo pregunta con malas intenciones y que realmente lo único que busca es que haya un fallo para así penalizarlo.

Pero C lo hace, B saca pecho de la buena labor de gestión que ha hecho (nótese las escasas referencias a B en el texto), A está contento, su proyecto ha triunfado, podrá asumir más proyectos y le será reconocido. Seguro que hay bonificaciones y grandes fiestas de empresa. C, pues C realmente se debería ir a dormir que mañana tiene que seguir trabajando.

¿Por qué C no está en A o quizá en B?, ¿Qué pasa cuando A y B después del trabajo bien hecho consideran que puede ser más barato? ¿Y si C se equivoca entre miles de aciertos?.


Eso lo dejamos para otra noche de un frustrante día

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