El próximo tren
sólo circula has Loranca; lo mejor para la supuesta prisa que tengo. Pero aún
es mejor la peste a colonia, maquillaje y demás potingues que lleva encima la
de al lado y que me está levantando dolor de cabeza.
Ha sido otro día
con sueño. Llegar y desayunar como es menester (por cierto, la de los potingues
se ha quedado y a mi me va a dar un chungo). Seguimos con la mañana; repaso de
que lo que hay que repasar, correo y finiquitado.
Revisar otras
serie de temas y algún que otro detalle (quedan cinco minutos para el metro, ya
no estamos rodando en tiempos) que mejor
pasar por alto, cerrar a por otra cosa, que va a hacer lío seguro.
Un poco de salita
que hoy me ha tocado por el bien de todos y a desayunar.
Otro día de gran
sueño por trasnochar y madrugar, esta vida que he elegido, es lo que tiene.
Para terminar
bonito, se agradecen estos despertares en lo que no peleo solo, en esa en que
el sol está luchando por salir al barrio mientras yo me acerco al metro.
No hay comentarios:
Publicar un comentario