sábado, 27 de agosto de 2011

Aventuras de ingeniero

Esta será la nueva sección de este blog que tengo tan abandonado, si hay alguien ahí, perdón (y esta disculpa si es de verdad).

Es fácil y sencillo de lo que va a tratar, es otro diario, que irá de Lunes a Viernes, respetando fiestas de guardar y demás días que el ingeniero esté de vacaciones. Hoy pongo las dos primeras semanas, no se si iré día a día (en papel seguro), pero de vez en cuando iré haciendo inventario por aquí.

No se si será bonito, o si será divertido, pero así serán los días desde los ojos de un ingeniero.


Día 1: lectura, conocer al hijo adoptivo de Thor y algunos giros más. (16-Agosto-2011)

¿Tenéis alguna pregunta?. Y así empieza la aventura. 9:00 y ya con una tarjetita de esas que te abren puertas dispuesto a reventar todas y cada una de ellas. Un ordenador compartido debido a los fallos de red y a leer documentación. Puede parecer aburrido, y en ocasiones, lo es; pero siempre es necesario. Abres un mapa. Cuando lees algo te va sonando, algo se te queda y cuando intentan que te entretengas, pues por lo menos no te suena a chino y hay una base que te ayuda a seguir el hilo.

Hora de comer, realmente hace mucho calor. 9 €, me parece justo. El horario partido, sin costumbre y con calor es duro y para los siesteros como yo pues que voy a contar. Pasa más lento, no hay mucha gana de leer. Entiendes el mapa. 18:00 horas se acaba el primer día comprobando que cuatro paradas de metro es un lujo y que además gustan. Relacionado con la jornada laboral llegas con ganas de sofá pero hay que prevenir y ser seguro. 1 hora después y unas cuantas firmas después. SOFA.

Día 2: Elimina, MADRID/MEN. Copiando y pegando. (17-Agosto-2011)

Para esto hay que estar preparado y volar. 5:45 de la mañana, el bicho te avisa de que hay que funcionar. Salir de casa a esas horas tiene una cosa buena, no hace calor.

7:00 llegas, fichas, prensa y correo y a leer. Con una pregunta pendiente que hacer y unas dudas que resolver.
Con todo ya resuelto, por fin, cuando te encaminas a la lectura una pequeña petición. Mecánico y repetitivo, pero algo al fin y al cabo.

Se termina y hay otra petición, menos mal. EN la misma línea, ese tipo de trabajos que hace la gente sin experiencia que acaba de entrar, vamos lo que soy, pero que te deja la sensación de, si, hacer lo mismo, pero no estar perdiendo el tiempo, poner tu ladrillo para que el edificio se siga construyendo. Y así pasa la mañana, nueva incorporación. Copiar y pegar. Son ya las 15:00 horas, sales, a casa, en media hora estas comiendo, me parece justo el día.

Día 3: Incorporaciones. Terminas, lees, apuntas y a última hora. (18-Agosto-2011)

Cenas copiosas unidas a tensión antes de acostarse un poco tarde no es muy recomendable para madrugar y rendir al día siguiente, pero ha sido medianamente posible. Pero bueno, se ha medio conseguido y no se ha atisbado a ningún barcelonista feliz, si acaso con ojeras en territorio hostil y alguno del atleti que ya no son tan mala gente.

Nuevas incorporaciones y una nota curiosa, me suena, pero de otros ambientes, digamos que eran otros tiempos y otras costumbres. Pero bueno, puede ser muy curioso, cuanto menos, habrá batallitas que contar y compartir, si es que me acuerdo.

Comer en el burger no es lo más recomendable y vuelta a la libertad en el camino al curro. Esperas a pedir trabajo, esperas, esperas, te lo dan, te lo explican (el pro va a servir para algo) y cuando inicias, pues como que son las 18:00 horas y hoy mejor no perder el metro que hay huelga.

Día 4:  Rápido no significa bien. Calidad es rápido y bien. (19-Agosto-2011)

Te levantas y te planteas si tocará o no desayunar. Aunque piensas que no, al final se que sí, has perdido tiempo por no encontrar la manera de colgar las mangas de la camisa. En el metro corre airecillo, cosas de las ventanas abiertas, llegas, es buena hora. La fórmula sale, era una cuestión de coincidencia de inicios y a seguir completando.

Los papeles dicen que toca madrugar la semana que viene, me parece justo. Quizás la comida repita un poco. Suena música y el ambiente te recuerda que es viernes por la tarde, y te dan ganas de pedirte una copa, así que mejor poner música tranquila.

Primera semana completada ahora a “descansar”. Creo que a partir de ahora me aficionaré a la frase: Por fin es Viernes.

Día 5: Primer Lunes, sueño, buen trabajo. Me reconozco. (22-Agosto-2011)

La tormenta no ha permitido muchas horas de sueño y pintaba a día complicado y pesado. Las calles y las vías se ponen demasiado temprano para mis costumbres, pero se llega y la mayor parte de las luces están apagadas, a lo largo de la mañana se encenderán. Nueva incorporación y a seguir cortando y pegando. Charla de bienvenida y saber que ya puedo pedir las horas para Gandía, aunque tenga que confirmarlo el siguiente Lunes. La mañana, cierto es que se ha pasado rápido, estoy fuerte, me reconozco y me podría acostumbrar, podría estar curioso y ME ENCANTA. Eso sí, ahora ni comer ni gaitas al sofá directo a la espera de una  bonita tarde sonimágica.

Día 6: Los Martes son muy duros. Mucha información. Al palo. (23-Agosto-2011)

Se confirma mi teoría de que sin duda los martes son el peor día de la semana. No hay fuerzas, se acabaron ayer y aun queda mucha tiempo para recuperarlas. Lo mejor, una siesta, pero hoy toca Sierra Nevada y el SUR tira mucho.

Llegando el primero, leer lo que ayer dormiste (AS) y un poco de redes sociales y contestaciones para empezar a copiar y pegar. Algo incomodo pero se pasa rápido. Esperando al desayuno te das cuenta que lo que realmente hay es sueño, no hambre, pero aun así Dinosaurios y sándwich y después limpiar sin acritud. A la vuelta, un detalle y sobreinformación, los circuitos son mi futuro y habrá que pegarse con ellos, estoy fuerte, cansado pero muy fuerte. Sigues copiando y a jugar, mañana más y mejor y por la escuadra, sin rozar el palo.

Día 7: Así no. Tal como empieza, acaba. Cojo las horas y las tiro a la basura. (24-Agosto-2011)

Si hoy estoy encabronado. Me ha costado la vida levantarme. Las noches se hacen cortas y dejar pasar el despertador sólo implica correr e ir con prisas. No hubiera pasado nada si perdiera unos minutos llegando tarde. Copiar y pegar para borrar. Sesión doble de desayuno ya con el cabreo en el cuerpo pero con una pequeña sorpresa ¿Qué coño haces aquí?. Toca volver hay dudas que solo conducen a la perdida total y absoluta de tiempo. La fórmula sale y voy a dejar de escribir, no porque ya haya llegado, me quedan dos estaciones, estoy hoy hasta la poya y  mañana va a ser un día divertido en el que seguro que alguien viene a tocarme los cojones.

Día 8:  No es como se empieza, es como al final se acaba. Pensando. Me vuelvo a reconocer. (25-Agosto-2011)

Levantarse ha vuelto a ser duro, te acuestas muy tarde, el móvil suena y te despierta y aun queda noche para intentar dormir, pero hay intentos que no salen bien. Hay que rodar en tiempos bajos. Te pones a ello, no debería haber más copia y pega, pero puede haberlo y estas cansado, y no te apetece y la cabeza en todos los sitios menos en el que debe. Hasta el previo al segundo desayuno, sin duda muy duro. Te mandan pensar, la cabeza se reactiva, está hecha para eso y le pone, le gusta. Pues a empezar a pensar es bueno. No mezclar. Mañana saldrá la fórmula y posiblemente humo de la cabeza, pero será para bien. A ver con cuanto cansancio llego.

Día 9: No se como contarlo, es complicado, el curro bien, contando y pegando. (26-Agosto-2011)

Esto se trata de poner las experiencias del ingeniero en su nueva aventura y vamos a tratar de no irnos por las ramas y ser fiel a la historia.

Otra noche corta implica que levantarse cuesta y afeitarse sin que den las seis es, cuanto menos, una acción que implica mucho riesgo y poca simetría. Das las buenas noches y como es menester, a correr como el desgraciado que estas hecho. Ha tocado llegar un pelo tarde y ahora pues toca seguir con lo que estabas. Las cuentas no cuadran salvo la de que el número de desayunos es 2. Consigues cuadrar y creo que va a tocar pensar mucho, el Martes hay que ver resultados. Durante la mañana tiene que sonar el móvil y se ve el correo, no es bonito. Cosas así te pillan descolocado. Da igual el sueño, el hambre y el resto de cosas. Te vistes y te vas. Ánimo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario