La tele, ese cacharro que veis ahí arriba, cuanto tiempo hemos pasado delante de ella, y cuanto tiempo pierden las nuevas generaciones delante de ella.
Que le ha pasado a ese cacharro que nos entretenía cuando éramos pequeños, donde están aquellos personajes de cuando éramos muy pequeños.
Por que ahora los niños de hoy en día son así, poner la 2 y ver quienes les mandan a dormir y seguro que lo comprendereis.
Donde estan esas grandes series, y porque será que ya no las hay nuevas, por poner un ejemplo, porque un niño al levantarse y ver cuatro se pregunta que son esos dibujos tan raros de un señor(o niño) conn rabo y que se le vuelve el pelo amarillo. Seguro que si se hiciera un estudio, la audiencia seguiria siendo de los que aun nos sentimos niños, o que por lo menos no nos importa volver a serlo al ver esas grandes series.
Que educación podemos esperar si las tardes estan llenos de programas para toda la familia consistentes en mentiras gritos y demás absurdeces.
Por suerte y aunque suene mal, siempre nos quedara el deporte, benditas carreras ciclistas que nos libran de ver el resto de intentos de programas.
Está claro que aun quedan cosas decentes que se puedan ver, pero mi pregunta es muy simple, porque para ver buena tele nos tenemos que quedar hasta las dos de la mañana y sin embargo para enterarnos de quien engaña simplemente hay que poner la tele a la hora de la merienda.
Que a que viene esta reflexión, tan solo hay que ver Salvados por la tele, sencillamente un retrato de la televisión actual.
Pero bueno, sigamos siendo niños, sigamos teniendo el ideal de la familia, con los Simpsoms, aprendamos de los grifint, cocinemos con arguiñano, salvemos el mundo con Goku, pasemos las tardes con perico y de Andres, madrugemos para ver correr unos toros, y salvemonos con el follonero. Y demos las gracias a Berto (y a su tio) por obligarnos a trasnochar y asi poder echarnos la siesta mientras dan el resto de basuras.
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